Cuando publiqué el artículo ¿Por qué uno enferma de cáncer?, en uno de los comentarios al mismo me preguntabais “cómo es posible curar un cáncer y cómo prevenirlo”. Intentaré dar una respuesta aquí a estas dos preguntas desde mi experiencia y desde mi forma de trabajar.
¿Cómo es posible curar un cáncer? Más que de “curar un cáncer” voy a hablar de “sanar a la persona” de un cáncer. Ya sabéis lo mucho que me gusta la precisión del lenguaje que usamos, ya que nuestro inconsciente es inocente y hay que hablarle con las palabras precisas si queremos obtener un resultado concreto en la colaboración con él. No olvidemos que para él nuestros pensamientos y palabras son órdenes.
- La primera condición imprescindible para que se dé la sanación es que la persona comprenda la enfermedad. La enfermedad viene a darnos un mensaje, indicarnos dónde nos hemos equivocado, dónde y en qué nos hemos alejado de nuestro Ser, de nuestro equilibrio interno, de nuestra armonía. Sin esa comprensión la enfermedad se convierte en “una mala suerte”, “una maldición” y el enfermo en “una pobre víctima” del azar. Pero ya sabemos que el azar no existe, que todo tiene una razón de ser y en este caso, el cáncer o cualquier otra enfermedad, tiene un significado muy concreto. En mis sesiones de terapia siempre buscamos ese significado. Investigamos qué manera de pensar llevó a la persona a percibir su realidad de forma dañina para ella misma, en qué momento tomó la decisión equivocada, tuvo la reacción errónea, dónde se generó aquellas emociones negativas que le provocaron el sufrimiento que desencadenó el desarrollo del cáncer. Es imprescindible que la persona tome conciencia del conflicto que vivió.
- La segunda condición es pasar a la acción. ¿Qué significa eso? Significa varias cosas. Primero tomar la decisión de vivir y sanar. Es muy importante. Si la persona no quiere vivir ningún médico, terapeuta, medicamento o terapia sería capaz de ayudarle. Después la persona tiene que “darle la vuelta a su vida como si fuera un calcetín”. Me gusta esta frase ya que es muy gráfica. Uno tiene que adoptar profundos cambios en su vida para sanar de un cáncer. Esto incluye cambio de manera de pensar, cambio de creencias, el perdón, cambios internos y cambios externos en el entorno ya que muchas veces el detonante del cáncer está en casa, en la familia, en el trabajo. A veces es necesario cortar vínculos con familiares, pareja, hijos, ya que estos resultan tóxicos para la persona enferma de cáncer. En las sesiones trabajamos para que todos estos cambios se hagan posibles.
- En determinados casos puede ser necesario que la persona haga una cuarentena, alejarse de su vida anterior, tomar perspectiva, reflexionar, darse un tiempo y espacio para decidir cómo va a seguir adelante. No siempre se recomienda una cuarentena, y no siempre la persona es capaz de decidirse hacerla, pero en la mayoría de los casos es algo que le salva la vida. La cuarentena existe desde la antigüedad. Ya la aplicaban los médicos chinos hace más de 5000 años porque sabían que los mayores conflictos que vivimos están siempre relacionados con los más cercanos al enfermo, con sus familiares y su entorno.
- La tercera condición es recibir ayuda terapéutica adecuada. De forma paralela con la toma de conciencia, la comprensión y los trabajos con el inconsciente en las sesiones de terapia trabajamos la energía. Equilibrar los centros energéticos (chakras), reforzar el campo electromagnético del cuerpo, restaurar el flujo de energía en los meridianos y elevar la frecuencia vibracional de la energía de la persona es fundamental. Los chakras regulan el funcionamiento energético del cuerpo. Si están bloqueadas o desequilibradas es peligroso para el organismo, este se debilita, sus funciones de ven afectadas y se producen muchas pérdidas de energía. Ya expliqué en anterior artículo la importancia de mantener las vibraciones por encima de 6500 bovis, que es la medida que marca la diferencia entre la salud y la enfermedad. Con vibraciones más altas los procesos curativos en el cuerpo se dan con mayor facilidad. Igual que el cuerpo físico tiene venas y arterias, nuestros cuerpos energéticos tienen canales llamados meridianos por los que circula la energía. En terapia restauramos el flujo energético de los meridianos para que los órganos puedan restaurar su correcto funcionamiento. Finalmente, reforzar el campo electromagnético del cuerpo ayuda a proteger el organismo de influencias energéticas externas, es su defensa natural, igual que lo es la piel para el cuerpo físico.
- En las sesiones de terapia igualmente hacemos limpieza de bloqueos energéticos de todo tipo para restaurar el equilibrio energético de la persona. Se eliminan patrones repetitivos, se reactivan las glándulas, se restablece el equilibrio y la armonía en el organismo. Igualmente se potencia la voluntad de la persona (es una cuestión energética por extraño que parezca) y se trabaja sobre la autoconfianza y el poder personal.
- Muchas veces la raíz de que una persona atraiga una vivencia conflictiva concreta que le genere una enfermedad como el cáncer, está en otras vidas, por lo que en terapia igualmente hacemos limpieza kármica.
- Cuando una persona adquiere el compromiso de sanar, consigo misma y conmigo como terapeuta, las jerarquías de luz empiezan a trabajar sobre ella, haciendo posible que se dé todo lo necesario para que la persona sane. Empiezan a sanarla a nivel energético sutil y poco a poco los cambios van bajando a nivel físico. Se sanan las percepciones de la persona para que modifique sus patrones mentales, sus creencias, se libera sufrimiento que ya no le corresponde llevar, se liberan y eliminan bloqueos, se transmuta la información a nivel celular, se le hace un “reseteo y reprogramación” si utilizamos el símil informático, se regeneran órganos y sistemas del cuerpo físico. Se le ayuda a la persona a producir los cambios que necesita a nivel material en su entorno, familia, etc.
¿Por qué no siempre las personas sanan? Se pueden dar varias situaciones en las que la persona no consigue sanar.
- A veces la persona no cree que pueda cambiar, se siente cansada de la vida por haber sufrido mucho y sólo se quiere ir de este mundo. Si esto ocurre y vemos que es una decisión consciente debemos respetarla, es su deseo, su decisión. Nadie puede decidir por otro vivir o morir.
- A veces los tratamientos invasivos como la quimioterapia, radioterapia, etc., agotan la energía vital de la persona, agotan las fuerzas del cuerpo y este no consigue recuperarse. En esos casos los trabajos energéticos que suelo hacer son para disminuir la carga que la persona lleva consigo para que se vaya de este mundo con la menor cantidad de bloqueos o memoria conflictiva posible. Son casos en los que no se consigue sanar el cuerpo pero sí se va sanando el alma de la persona.
- En otros casos hay personas enfermas de cáncer que no consiguen o no quieren perdonar, y creen que son los demás los que deben cambiar. En ese caso la persona rechaza la comprensión, rechaza la ayuda, la terapia. Su propio orgullo y rigidez le impiden cambiar y sanar. Ahí poco se puede hacer. Si han venido a terapia es porque un familiar les ha medio obligado. El enfermo realmente no quiere sanar.
- Hay casos en los que la persona no debe sanar del cáncer. Son casos en los que a través de la enfermedad se libera una gran carga kármica. La persona ha venido a esta vida para experimentar exactamente esta enfermedad y los seres de luz que me guían no me permiten intervenir. Hay un gran aprendizaje en la enfermedad y la persona debe atravesar la experiencia.
¿Cómo prevenir un cáncer? La respuesta es muy simple: mantente en armonía y experimentarás la Salud Perfecta siempre, ya que es tu estado natural.
Aquí me gustaría aclarar algo que considero muy importante. No deberíamos siquiera hablar de “prevenir enfermedades”. ¿Por qué? Te explico. El significado del verbo “prevenir” es: “Tomar precauciones o medidas por adelantado para evitar un daño, un riesgo o un peligro”. Esto quiere decir que si me dispongo a prevenir un cáncer yo ya doy por hecho de antemano que ese cáncer es posible y probable. El mensaje que le doy a mi inconsciente con eso de “prevenir” la enfermedad es que yo tengo miedo de la enfermedad, vivo con miedo a algo que doy por seguro que va a ocurrir. Como bien sabemos, lo que uno teme lo atrae, es una Ley Universal. “Prevenir” algo es como invitarlo a que entre en mi vida, es una invitación basada en el poder de atracción de la emoción que está detrás: el miedo. Alguien dijo que en la vida todo está basado en sólo 2 emociones: o está basado en el amor o está basado en el miedo. Debemos aprender a basar nuestra vida en el amor, no en el miedo, por complicado que resulte hoy en día con todo lo que nos bombardea la televisión, los anuncios, los medios, etc. Aunque nos quieran hacer creer lo contrario, ¡No tenemos nada que temer! La Vida nos sostiene Siempre, siempre lo ha hecho. Sólo debemos tener Fe en ella y permitirle que fluya a través de nosotros. Somos parte de la Vida, Somos Vida, sólo debemos vivirla y disfrutarla, no temerla. Por tanto no hay nada de qué preocuparnos, no hay nada que debamos “prevenir”. Igual que no se puede “luchar” por la Paz, no se debe “prevenir” la enfermedad. Uno puede Ser la Paz y puede y debe ser la Armonía misma para expresar la Perfecta Salud.
Luz, Paz y Amor
Me encantaría conocer tu opinión y comentarios sobre este tema, y si te gusta compártelo.

Hola!
Muchas gracias! Sí, me queda claro la cura, y me ha parecido muy interesante lo de «no prevenir». Solo que teniendo en cuenta que todo son acciones conscientes de personas adultas, ¿por qué enferman los niños? ¿cómo pueden sanar?
Gracias, saludos!
Hola María,
Tu pregunta es muy interesante. Escribiré un post especialmente sobre este tema.
Gracias!